LOGO

Nuestro proyecto: Sueño LatinUameRicano

Cuando buscábamos un nombre o algo que identifique nuestro proyecto, pensamos muchas ideas, y en el alboroto de nombres empezamos a jugar con las palabras buscando relacionarlas. Decíamos: “lo que vamos a hacer es un sueño de toda la vida”, algo que siempre quisimos vivir, salir con una combi a recorrer los países de Latinoamérica, ver qué hay más allá, conocer cómo viven y piensan nuestros hermanos de Latinoamérica”. Y siempre cuando le contábamos a otro, empezábamos con que era un sueño...Casi naturalmente “sueño” fue una de las palabras que se quiso quedar en nuestro logo. Latinuamericano, escrito con “u”, surge un poco después. 

Como gráfica queríamos hacer una estampilla. De base incorporamos una imagen que nos gusta mucho; una pintura del polifacético uruguayo Joaquín Torres García, llamada América invertida (1943). Él creó con un trazo simple el imaginario de otra América posible. Aunque convivió con las vanguardias artísticas de Europa (y llegó a vivir en Europa), Joaquín siempre tuvo clara su vocación latinoamericana: “Nuestro norte es el Sur. No debe haber norte, para nosotros, sino por oposición a nuestro Sur. Por eso ahora ponemos el mapa al revés, y entonces ya tenemos justa idea de nuestra posición, y no como quieren en el resto del mundo. La punta de América, desde ahora, prolongándose, señala insistentemente el Sur, nuestro norte”.

                          
Para nosotros simboliza el “romper los paradigmas” y mirar las cosas siempre de otra manera: ¿por qué arriba? ¿O abajo?, replantearnos las ideas impuestas desde afuera, poner todo “patas arriba” y ver qué cosas nuevas vemos desde esa nueva perspectiva. Nos gusta mucho esta idea, y la incorporamos como base de nuestro logo simplificando algunos dibujos del autor original.
Representamos en caricatura a la rusita, trazamos un camino irregular que será el trayecto de nuestro viaje.
Incorporamos además a dos personajes de un autor que nos gusta mucho: el negro Roberto Fontanarrosa. Apasionados por su lectura desde hace un tiempo, elegimos al gaucho Inodoro Pereyra y su perro Mendieta, compartiendo el mismo mate. Queríamos que estuviera presente la IDEA DE COMPARTIR con las personas que crucemos en el camino nuestra cultura y nuestro indispensable y compañero fiel: “el mate”.

inodoro y mendieta
Un texto de Lalo Mir expresa claramente lo que significa:

EL MATE



El mate no es una bebida. Bueno, sí. Es un líquido y entra por la boca. Pero no es una bebida. En este país nadie toma mate porque tenga sed. Es más bien una costumbre, como rascarse. 

El mate es exactamente lo contrario que la televisión: te hace conversar si estás con alguien, y te hace pensar cuando estás solo. 

Cuando llega alguien a tu casa la primera frase es "hola" y la segunda: "¿unos mates?". 
Esto pasa en todas las casas. En la de los ricos y en la de los pobres. Pasa entre mujeres charlatanas y chismosas, y pasa entre hombres serios o inmaduros. 
Pasa entre los viejos de un geriátrico y entre los adolescentes mientras estudian o se drogan. 
Es lo único que comparten los padres y los hijos sin discutir ni echarse en cara. 
Peronistas y radicales ceban mate sin preguntar. En verano y en invierno. 
Es lo único en lo que nos parecemos las víctimas y los verdugos; los buenos y los malos. 
Cuando tenés un hijo, le empezás a dar mate cuando te pide. Se lo das tibiecito, con mucha azúcar, y se sienten grandes. Sentís un orgullo enorme cuando un esquenuncito de tu sangre empieza a chupar mate. Se te sale el corazón del cuerpo. 
Después ellos, con los años, elegirán si tomarlo amargo, dulce, muy caliente, tereré, con cáscara de naranja, con yuyos, con un chorrito de limón. 
Cuando conocés a alguien por primera vez, te tomás unos mates. La gente pregunta, cuando no hay confianza: "¿Dulce o amargo?". El otro responde: "Como tomes vos". 
Los teclados de Argentina tienen las letras llenas de yerba. La yerba es lo único que hay siempre, en todas las casas. Siempre. Con inflación, con hambre, con militares, con democracia, con cualquiera de nuestras pestes y maldiciones eternas. Y si un día no hay yerba, un vecino tiene y te da. La yerba no se le niega a nadie. 
Éste es el único país del mundo en donde la decisión de dejar de ser un chico y empezar a ser un hombre ocurre un día en particular. Nada de pantalones largos, circuncisión, universidad o vivir lejos de los padres. 
Acá empezamos a ser grandes el día que tenemos la necesidad de tomar por primera vez unos mates, solos. No es casualidad. No es porque sí. El día que un chico pone la pava al fuego y toma su primer mate sin que haya nadie en casa, en ese minuto, es que ha descubierto que tiene alma. O está muerto de miedo, o está muerto de amor, o algo: pero no es un día cualquiera. 
Ninguno de nosotros nos acordamos del día en que tomamos por primera vez un mate solo. Pero debe haber sido un día importante para cada uno. Por adentro hay revoluciones. 
El sencillo mate es nada más y nada menos que una demostración de valores… 
Es la solidaridad de bancar esos mates lavados porque la charla es buena. La charla, no el mate. 
Es el respeto por los tiempos para hablar y escuchar, vos hablás mientras el otro toma y es la sinceridad para decir: "¡Basta, cambiá la yerba!".
Es el compañerismo hecho momento.
Es la sensibilidad al agua hirviendo.
Es el cariño para preguntar, estúpidamente, “¿está caliente, no?".
Es la modestia de quien ceba el mejor mate.
Es la generosidad de dar hasta el final.
Es la hospitalidad de la invitación.
Es la justicia de uno por uno.
Es la obligación de decir “gracias”, al menos una vez al día.
Es la actitud ética, franca y leal de encontrarse sin mayores pretensiones que compartir.

  

El gaucho Inodoro hablaba como le sonaban las palabras, por ahí se comía alguna letra, tenía su lunfardo particular, haciéndose entender de cualquier manera. Jugando a pronunciarlas, llegó Latinuamericano con "U". Por otro lado queríamos resaltar la palabra SUR, haciendo alusión al logo al revés. 

Así quedó conformado SUEÑO LATINUAMERICANO


El toque final con su creatividad lo puso Noelia Terraf, la hermana de Cheché, que nos ayudó a compilar todas las ideas y darle más fuerza en una sola gráfica.¡Gracias Noe por tu inmenso aporte!


nuestro logo final

… “Porque existe un país, al sur del mundo, atado a la cola del barrilete americano, un país mágico y extraño….”


Y a pesar de estar lejos un tiempo, ¡¡¡volveremos a nuestra hermosa ARGENTINA!!!

Carola y Cheché.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario